Antes de nada, debo disculparme por mi falta de displina y regularidad a la hora de llevar al día mi blog. Las nuevas circunstancias de mi vida me impiden un mayor tiempo libre y, el poco que tengo, prefiero por ahora emplearlo en otros menester que, aunque siempre incluyen el cine (y nunca tanto como me gustaría), no así tanto la escritura. De todas formas, mi blog continúa en activo y procuraré con mayores actualizaciones.
Dicho esto, me gustaría meterme de lleno en el tratamiento que está llevando el cine y la televisión con respecto a las temidas elecciones a la presidencia norteamericana (unas elecciones que deberían ser mundiales y no sólo estadounidenses, ya que es una decisión que, tristemente, nos atañe a todos los seres vivos e inertes).
El séptimo arte se ha involucrado como nunca en la política y desde todos los sectores animan a la gente a votar el próximo 4 de noviembre. Michael Moore, como no podía ser de otra forma, ha elaborado un nuevo documental contra los republicanos, llamado Slacker Uprising, con la novedad de que ha permitido su visionado gratuito a través de su página web (y a la que pueden acceder pulsando aquí).

Por otra parte, el siempre combativo (aunque irregular) director neoyorquino Oliver Stone también ha aprovechado el filón presidencial para ofrecer una biografía del actual presidente, George W. Bush, posiblemente el hombre más odiado de la faz de la Tierra, en W., estrenada intencionadamente 15 días antes de las elecciones.
Parte de Hollywood en Declareyourself.com
La plataforma alojada en el site declareyourself.com ha contado con la colaboración (altruista, aunque parezca increíble) de una multitud de actores norteamericanos de primera plana. Contando con la dirección de Steven Spielberg, y dividida en dos partes con una diferencia de un mes entre una y otra emisión (la segunda salió el 29 de octubre), nos muestran con un fondo blanco y un entretenido montaje, el mensaje y las razones por las cuales NO hay que ir a votar (irónicamente, por supuesto).

El séptimo arte se ha involucrado como nunca en la política y desde todos los sectores animan a la gente a votar el próximo 4 de noviembre. Michael Moore, como no podía ser de otra forma, ha elaborado un nuevo documental contra los republicanos, llamado Slacker Uprising, con la novedad de que ha permitido su visionado gratuito a través de su página web (y a la que pueden acceder pulsando aquí).

Por otra parte, el siempre combativo (aunque irregular) director neoyorquino Oliver Stone también ha aprovechado el filón presidencial para ofrecer una biografía del actual presidente, George W. Bush, posiblemente el hombre más odiado de la faz de la Tierra, en W., estrenada intencionadamente 15 días antes de las elecciones.
Parte de Hollywood en Declareyourself.com
La plataforma alojada en el site declareyourself.com ha contado con la colaboración (altruista, aunque parezca increíble) de una multitud de actores norteamericanos de primera plana. Contando con la dirección de Steven Spielberg, y dividida en dos partes con una diferencia de un mes entre una y otra emisión (la segunda salió el 29 de octubre), nos muestran con un fondo blanco y un entretenido montaje, el mensaje y las razones por las cuales NO hay que ir a votar (irónicamente, por supuesto).
Lo peor para mi gusto son las apariciones de Leonardo Di Caprio, nuevo abanderado de la izquierda norteamericana, que no hace sino mostrar su egocentrismo con frases lapidarias pero que, más que convencerme, me da repulsión (aunque tampoco sé explicar exactamente por qué).
Por cierto, ¿no echan de menos a George Clooney, el hombre de Hollywood más activo contra los republicanos, en todo este tinglado?. ¿Será porque su protagonismo se veía disuelto entre tanta estrella mediática o porque no le pagaban lo suficiente por su participación?
La opinión salpica a las series de animación
La FOX, un canal tradicionalmente conservador hasta límites insospechados (según el tratamiento que siempre le han dado los medios de comunicación), ha ofrecido una clase ejemplar de tolerancia ideológica al permitir que sus dos series más laureadas (y con razón, ya que son indiscutiblemente las dos mejores series animadas de la Historia), Los Simpson y Padre de Familia, muestren su apoyo hacia el candidato demócrata.
Homer tiene un problema a la hora de votar, y es que aunque él quiera con todas sus ganas dar su apoyo a Obama, la máquina electoral le pone los más esperpénticos impedimentos (como ocurriera realmente en las pasadas elecciones norteamericanas, dando así a Bush la victoria más fraudulenta que se recuerda).
Con respecto a Padre de Familia, Stewie le quita a un nazi su uniforme y, tras vestirse con él, se da cuenta de que lleva una chapa con el nombre del candidato republicano, John McCain, y su número dos, Sarah Palin.
Por último, me gustaría mostrarse un cortometraje creado dentro de la serie PG Horror Shorts Contest, que muestra la mañana siguiente a las elecciones norteamericanas si el ganador ha sido cierta persona... El proyecto se llama The Mourning After y está genialmente realizado.
El segundo video versa sobre la rebelión de los actores ante la imposición de Spielberg de que digan que no se debe votar. Di Caprio vuelve a dar la nota en busca del protagonismo y, aunque su fin sea claro y digno, el medio da un poco de grima.
Por cierto, ¿no echan de menos a George Clooney, el hombre de Hollywood más activo contra los republicanos, en todo este tinglado?. ¿Será porque su protagonismo se veía disuelto entre tanta estrella mediática o porque no le pagaban lo suficiente por su participación?
La opinión salpica a las series de animación
La FOX, un canal tradicionalmente conservador hasta límites insospechados (según el tratamiento que siempre le han dado los medios de comunicación), ha ofrecido una clase ejemplar de tolerancia ideológica al permitir que sus dos series más laureadas (y con razón, ya que son indiscutiblemente las dos mejores series animadas de la Historia), Los Simpson y Padre de Familia, muestren su apoyo hacia el candidato demócrata.
Homer tiene un problema a la hora de votar, y es que aunque él quiera con todas sus ganas dar su apoyo a Obama, la máquina electoral le pone los más esperpénticos impedimentos (como ocurriera realmente en las pasadas elecciones norteamericanas, dando así a Bush la victoria más fraudulenta que se recuerda).
Con respecto a Padre de Familia, Stewie le quita a un nazi su uniforme y, tras vestirse con él, se da cuenta de que lleva una chapa con el nombre del candidato republicano, John McCain, y su número dos, Sarah Palin.
Por último, me gustaría mostrarse un cortometraje creado dentro de la serie PG Horror Shorts Contest, que muestra la mañana siguiente a las elecciones norteamericanas si el ganador ha sido cierta persona... El proyecto se llama The Mourning After y está genialmente realizado.
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