Crítica de Medio flipados

Tienes que estar muy smokado para disfrutar realmente de esta comedia cannábica, a medio camino entre la simpática Buen rollito y la patética Dos colgaos muy fumaos.

Este film a pesar de ser lineal, simple, sencillo, lleno de tópicos de la marihuana (hambre, falta de memoria, empatía o volar, literalmente hablando), pésimos efectos visuales y uno de los personajes más insoportables de la historia del cine (que encima está entre los tres protagonistas, os animo a que adivinéis a quién me estoy refiriendo), tiene algunos gags que provocan algo más que una sonrisa (cuando de niños prueban los protagonistas por vez primera la Planta Santa, el desconocido que duerme en el sofá o los diferentes y realistas tipos de "fumetas" que hay), se limita a menos de 90 minutos de duración y vemos simpáticos cameos de Stephen Baldwin, Snoop Dog (el rapero), Jon Stewart (el Xavier Sardá americano) o el "padre forzoso" Bob Saget, con una de las frases más magistrales del metraje ("¿que eres adicto a la marihuana? La maría no es una droga. Yo chupaba pollas para conseguir algo de coca, el día que hagas tu eso por marihuana podrás considerarte un adicto").

De todas formas, Bastante bien parado salió de este filme porque... ¿qué se podría esperar de un director que posteriormente filmó "eso" protagonizado por Britney Spears llamado Crossroads?